miércoles

Qué
vas a hacer. Te quedaste sin aliento, y el bondi no pasa hasta dentro de media hora,
y no, que te parta la cabeza un rayo, porque a este hijo de puta lo conocemos bien-
-Pero qué lindo día, las sorpresas nos inundan las sienes, y levantó temperatura otra vez, la chola, mi amiga.
-Me dijo que si me quedo piola me consigue un cartón, y amarillo, un pastelito para pintar de flores la pared, viste que la pieza está tan blanca.
Que mierda, un día de mierda, y la furia que te explota el pecho, el corazón que ya no está en ese lugar, ahora está en el parpado, presión ocular le dicen, , a mi no me engañan otra vez, estos hipócritas.
Qué es lo que vas a hacer. Si el agua se te escurre por el vientre.
Te chorrean los dedos, un enojo que no dejaste pasar, y ahora te sangra la garganta, y se te clavan las rodillas a mitad de camino, porque no
querés
volver.
-El bondi no viene ché, y si pateamos?
- Qué hijo de puta, me salpicó las piernas.
Vamos que tenemos que subir, afuera estalla el cielo, adentro, te estalla la clavícula porque hay algo que se te quiere escapar hace tanto tiempo y vos no dejás de quejarte, ni dejás de rebalsar las canciones de mierda que no pudiste cantar, los platos que se te caen porque te agarran los nervios, y ese perro de mierda que te persigue siempre que agarrás la bicicleta. Pucha, te salpicaste otra vez, y mirá que tenés que ir a laburar, bueno si los muertos en un papel es un laburito.
Mientras el tipo este no deja de cantar estas canciones, me envicio, porque el aire está sucio, como mi cerebro, como cada sueño que tengo , y me despierto con el agite del mar, con las ganas de pegarme un tiro en cada lado, y con esa sonrisa de mierda que me persigue a donde esté.
Porque todavía no puedo dejar de crecer mis brazos,
-Qué? qué dijiste?, pensás que no puedo escucharte?
El tiempo se revienta en cada parpadeo, en cada respiración puedo vernos abajo de la tierra, conquistando cada gusano que quiera comernos el cuerpo, tan indigna la vida, y tan muertas las cicatrices. Piel muerta por todos lados, mórbido, morbi, morbi, cada vez más morbi.
-La cara se le explotó al pelotudo ese, se ve que la dignidad le llegó un poco tarde y ahora empezó a lavar culpas.
La vieja está cada día más insoportable, no puede ponerse las chancletas pero sale a manguerear la vereda, sesenta y cinco grados bajo cero, pero ella necesita saber lo que hace Esther.
Aunque ya esté muerta.
Oxidada, hace tres años, en un cajón o un jarrón, no sé cual es el mejor lugar para que recuerden cuan digna fue tu vida. Que exista un pájaro azul que me cuente una historia para ir a dormir y me imagine que te mando un mensaje para pedir ayuda.
Sueño, hablo mientras duermo, pierdo la persona que soy, o me convierto en otra, o no, o si, que se yo ya quien habla.
La ventana me llena de frío, ese frío como cuando estoy con el cuerpo desnudo y no sé que hacer.
-Me resbala entendés?, toda la mierda que tenés para escupir, yo ya la tuve encima hace rato, no sé que te pensás que vos solo la pasaste mal, no eh querido, acá todos sufrimos, pero vos no tenés piernas.
qué lástima.
Mientras el viejo ese no tiene otra cosa mejor que hacer que pedirme el boleto, pero ni siquiera estoy arriba del bondi le explico, me trae un paraguas, un par de zancos y me obliga a bailar.
-No sé bailar.
Me invento pasos para que no me tire mientras estoy en movimiento, puedo correr cada vez más rápido, y esconderme entre las escamas de los peces. Muerta está la gente, a cada rato una explosión y mi cerebro contorsionado se escapa de una bestia que le juega carreras, no lo deja dormir. Choco contra la pared, está más blanca que mi pieza, que tu alma, quizás, choco, lleno todo de sangre, pero mi jeta está intacta, solamente mi estómago que sigue escupiendo, las ganas de vomitar
palabra
tras
palabra
y que mi enfermedad se convierta en cadáver,
exquisito claro,
Freno, porque ya no existen más paredes para chocar, el suelo, o el cielo, vos elegís,
recorrido perfecto que me sigue a todos lados, un camino atrás mio, y sobre mis ojos, la nada,
misma
canción
misma nota, para comenzar
Un viaje.
No es catarsis señores, es la vieja canción que suena hace cuarenta y cinco minutos y no la puedo cambiar del reproductor.
Déjenme de romper las pelotas con el volumen,
-Qué vocabulario, señorita.
Quién te dijo a vos todas estás cosas?
El cielo no habla nena, los sueños no existen, simplemente están ahi, para que no te vuelvas loca. Entendés?
Ahora, si vos hablás con los ojos abiertos y me decís que estás durmiendo, estamos en graves problemas.
Estamos?
Aramos.
Hace mucho tiempo que no existe vos y yo.
lástima,
cada vez más-

No hay comentarios: